Tercer panel de escritores 2013-2014. DA A CONOCER TUS POEMAS Y RELATOS CORTOS entre los miembros de nuestro club de escritura y nuestras comunidades literarias.
Bienvenido a nuestro nuevo panel de poemas y narraciones breves. Nuestro anterior muro de escritores ya está completo. Continuará, por supuesto, formando parte de las cadenas de escritura que van haciendo rodar vuestras creaciones literarias, pero ya ha alcanzado su límite de participantes y tenemos que renovarlo.
En esta ocasión vamos a destinar el panel a albergar vuestros haikus, poemas, microcuentos y relatos más cortos, por lo que la extensión de vuestras participaciones no ha de exceder las 50 líneas.
INSTRUCCIONES PARA DAR A CONOCER VUESTRO POEMA O RELATO BREVE EN NUESTRAS COMUNIDADES LITERARIAS:
1-Desplázate hacia abajo buscando el último comentario.
2- Dale al botón de “publicar” después de insertar, en el espacio en blanco reservado para tu comentario, tu nombre de autor y tu creación literaria.
3-Comparte esta cadena de escritura a través de las redes sociales para que todos los participantes continuéis sumando lectores.
Recuerda que este panel ha sido concebido para compartir únicamente tus creaciones más breves. Si lo que deseas es publicitar los datos de tus obras ya publicadas, puedes hacerlo
en la cadena de lectura que hemos creado específicamente para ello. El único requisito imprescindible es que escribas el ISBN de las obras que compartas : https://escrituracreativavalencia.com/2013/09/06/publicitar-gratis-una-obra-literaria-taller-de-escritura-creativa-en-valencia/
Invitación del panel de escritores:
LUNA de PAPEL,
Talleres de literatura y escritura creativa en Valencia
LA CODICIA
Soy un grano de arena perdido en el desierto,
donde mis hermanas me ayudan a moverme
empujadas por el beneplácito viento.
¡Él me esconde para que no puedan verme!
Es mi deseo sobresalir entre la arena
y por ello me despego de ellas, sin aprecio.
Ayer dejé sobre el mar ahogada la pena,
pues hoy quiero brillar a cualquier precio.
Trás la línea del horizonte hay riquezas
y quiero cruzarla, hasta alcanzar su centro.
¡La felicidad me espera tras las crestas
de las cumbres lejanas que relucen a lo lejos!
Pero el aire huracanado llegó a la orilla
y el grano de arena fué pulverizado por los vientos.
Teresa Sánchez Sánchez
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LA REALIDAD VACÍA -Una historia de amor en prosa poética- (Microrrelato)
El cántico de un pájaro trinado en mi ventana me despertó temprano mientras la luz del sol se filtraba a través de mi retama. Y mientras la mañana se estiraba entre las ramas aspiré el delicioso aroma del café penetrando el laberinto de mis postreras ganas…
¡Una noche de amor inigualable me regaló mi amada !Con ello dando vueltas, abrazado a mi almohada, pensando que era el rey y ella la reina del mejor cuento de hadas alguna vez contado, creyendo que era el dueño de aladas fantasías en un mundo complejo y yermo de alegrías, permanecí acostado escuchando el canto de la invisible avecilla penetrando hasta lo más profundo de mis entrañas.
Me levanté despacio , me duché lentamente renovando energías. Y mientras el agua por mi cuerpo se escurría cerré los ojos para seguir sintiendo que, en mis brazos, su cuerpo de amor se retorcía, respondiendo por entero al deseo que a los dos nos consumía.
Me vestí sin premuras, disfrutando el silencio que de pronto a la casa envolvía, mientras el pajarillo feliz se sacudía las alas que, entre flores amarillas, al sol resplandecían.
Lo miré con agrado y en mi boca, pausada, se bosquejó la risa de un niño enternecida. Entretanto el silencio audaz se concentraba en las luces difusas del día que nacía.
Y sin dudas fue eso precisamente lo que alertó a mi alma y la obligó a gemir entristecida. Frente al espejo, en mi mirada ardía la extraña sensación que me aturdía. Bajé las escaleras, veloz y sin aliento, partida en dos mi alma por un cruel presentimiento.
Allí estaban sus cosas, detalles, sentimientos, cuidados que no vi, su esforzada insistencia de amarme en cada objeto, de contagiarme su alma a pesar del cansancio que mi inseguridad provocaba en su intento por hacer de lo nuestro un renacimiento cotidiano. Obstaculicé sus intenciones de todas las formas posibles, la dejé sola en eso de imprimir magia en todo lo tangible y lo intangible…Y mientras descendía con la garganta estrangulada por un callado llanto, pensé en su alma, sí, en su alma que dejé olvidada en el tiempo que suele adaptarse al inevitable acostumbramiento.
Fue mucho antes…¡ Hoy lo sé!, cuando se inició su ausencia que aún no puedo asimilar, cuando me dejé llevar por las instancias del azar sin advertir en sus verdes ojos la ansiedad y en su llanto suave la espaciosa eternidad…
Sin percatar su levedad, preferí jugar solo las cartas de mi destino fatal, moviendo el cubilete de mis días, ajeno a su pesar, sin inferir en sus manos enlazadas el silencioso broche del final.
Sobre la mesa,vi el pequeño mantel y las tazas donde el café se enfriaba envuelto en el sopor del humo que ascendía. Y junto al jarrón con flores y espiguillas, el libro que ella estaba leyendo semejaba un reproche que no se detendría.
Lo miré entre sollozos que mi pecho partían, mientras la sal de mis lágrimas, como tizón ardiente, dolía en mi agonía, aprendiendo a morir en el espacio de la nada, en ese rincón de la sala, al lado del jarrón donde, indefectiblemente, cada mañana solía dejarme una rosa roja comprada en la florería de la esquina, en cualquier época del año.
Porque entendí, al fin, lo que ella quería cuando con suave voz me repetía:
-Ayúdame, mi amor, pues te amo tanto que no sé ni quién soy cuando estás cerca ya que he dejado de ser lo que he querido-
Y entre mil gritos la llamé por la casa sintiendo que su nombre rebotaba contra las paredes de los cuartos y contra las ventanas se estrellaba:
-Ayúdame, mi amor, te necesito…No te vayas, por Dios!…Vuelve conmigo! No supe amarte pero hoy he comprendido que tú eras mi luz, mi voz, mi diccionario…Hoy puedo conquistarte y ser feliz amándote más que a mí mismo…¡ Al fin podré ser parte de tu alegría amaneciendo contigo cada día y poder dormirme, cada noche, entre tus brazos!
-¡Perdóname, mi amor, ya sé que es tarde, que la noche llegó para mi vida, que tú muy lejos has partido y que no has de retornar jamás a mi regazo!-
Sobre el libro del amor no correspondido hoy mis lágrimas fluyen como un río.
AUTORA: Carlota de las Mercedes Gauna
SEUDÓNIMO COMO ESCRITORA: CARLOTA DALTON
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A la administración de esta página: Al elaborar mi relato lo hice en formato Word, letra Arial ,tamaño 12 , cuya numeración me dio exactamente 50 líneas. Aquí veo que el lineamiento requerido está excedido, y pienso que puede deberse al formato establecido aquí. Ante cualquier contravención al reglamento estipulado les solicito me lo hagan saber para solucionarlo. Atentamente….Carlota Gauna
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De acuerdo, Carlota. Bienvenida al panel.
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Muy bello tu relato, conmovedor ¡Felicidades!.
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Con mi aliento, voy acicalando los alrededores de tu cuerpo.
Con mi meneo, vigilo noche a noche tu flaqueza.
Con mi fama, aliso el litoral de tu deseo.
Y carente de virtudes que ofrecerte,
me alegra observarte de repente,
vagabundear desnudo, en mi mente. More Mtz
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¡Hermoso! Son los suaves alineamientos que conducen a la culminación de lo anhelado…
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Todo duerme en mi casa de paja
y una luna muy blanca ilumina el jardín.
Yo, sentado en el porche, contemplo
mi casa y mi huerto bañados en luz
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Muñeca de porcelana
Muñeca de porcelana
en la oscuridad me dañas,
nunca quise tu presencia,
el llanto que me buscaba,
atenazaba mis alas.
Un día te miré, soñé,
intuí tu marcha lenta
entre porcelana rota,
y la sonrisa te robé,
trozos de trapo, de loza.
Yolanda Del
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EL PUENTE
Cuando pienso en ti me convierto en un borrador,
en el boceto de un dibujo incompleto, sin colores ni bordes.
En la visión borrosa de un miope.
Soy el puente que te llevó
a la orilla de otro cuerpo que no es el mío.
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Soy una ciudad casi femenina
soy redonda, luminosa, desigual.
Al caminante curioso lo lleno de gozo
con mis vivencias de amor.
Mis entronques y veredas brindan placer al que llega.
Al final de mis recodos, con paciencia y acomodo
el extraviado paseante
quedará siempre expectante
de mi burbujeante candor. More Mtz.
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DAME TU MANO
Dame tu mano y hazme lo que quieras,
por dentro, por fuera y dado la vuelta.
Dame tu mano y demos una vuelta
facciamo un giro y hagamos un voyage
todo junto y distendido.
Dame tu mano y bésame,
hasta que mis labios sean de fuego
hasta que la unión sea perfecta.
Dame tu mano y bébeme
con los pies fríos no se piensa bien
si es un delirio
déjamelo creer.
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Hola. Yo agrego mi blog. En él tengo mis escritos cortos y un poema. http://inf3rn0.blogspot.com
El poema lo agrego acá:
//———————————————————–
Soy una veleta que pasea quieta
por la orilla del mar.
No conocía norte o sur este u oeste,
estaba ajena a cualquier punto cardinal.
Eres un suspiro cósmico,
un abrazo de rocío
que hizo de mi mundo una pirueta.
Recorriste mis entrañas, me rozaste en la mañana
y me susurraste sal.
Y en ella encontré historias de marinos, de sirenas y ballenas
gimiendo dichas y penas.
La sal de tus recuerdos.
de tus caricias
que por primera vez me hicieron vibrar.
Luego te fuiste y quedé girando sola,
con diamantes salinos asidos a mis aspas.
Los diamantes de tu memoria,
que me fueron corroyendo desde el centro hasta mis puntas;
porque después de ti nada más me hizo rotar.
Estoy añorando una caricia costera,
entre un cielo de narvales y un océano de tesoros astrales
antes de que me termine de averiar.
Te sigo esperando
para que remuevas los recuerdos que me maltratan
y me hagas dar vueltas una vez más.
//————————————————————-
Saludos.
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Hola. Quiero dejar un poema que escribí y la dirección a mi blog por si alguien quiere leer un poco más. Saludos.
//—————–Veleta——————–
Soy una veleta que pasea quieta
por la orilla del mar.
No conocía norte o sur este u oeste,
estaba ajena a cualquier punto cardinal.
Eres un suspiro cósmico,
un abrazo de rocío
que hizo de mi mundo una pirueta.
Recorriste mis entrañas, me rozaste en la mañana
y me susurraste sal.
Y en ella encontré historias de marinos, de sirenas y ballenas
gimiendo dichas y penas.
La sal de tus recuerdos.
de tus caricias
que por primera vez me hicieron vibrar.
Luego te fuiste y quedé girando sola,
con diamantes salinos asidos a mis aspas.
Los diamantes de tu memoria,
que me fueron corroyendo desde el centro hasta mis puntas;
porque después de ti nada más me hizo rotar.
Estoy añorando una caricia costera,
entre un cielo de narvales y un océano de tesoros astrales
antes de que me termine de averiar.
Te sigo esperando
para que remuevas los recuerdos que me maltratan
y me hagas dar vueltas una vez más.
/————————————————–
Mi blog es: http://inf3rn0.blogspot.com
Hasta pronto.
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POEMA DEDICADO A LOS QUE SUFREN DE ADICCIONES
“No cesaremos en la exploración
y el fin de todo nuestro explorar
será llegar a donde empezamos
y conocer el lugar por primera vez”
T.S. ELLIOT
En la calle comenzaron
a gritar, y fui a su encuentro
sin más ropa, sólo andrajos
y con un sombrero viejo.
Un joven triste y con polvo
de tanto tentar al cuerpo
tocando el nudo en sus piernas
quiso despertar del sueño.
Su hermana, humilde y antigua,
de un cielo venido a menos
tiende su mano alargada
al joven muchacho preso.
¿Quién eres, sino mi hermano,
De entre todos el pequeño?
¿Qué haces sin voz ni vida,
Persiguiendo el mar y el viento?
Todos estamos en todos
-vino a decirme el reflejo-
Y sus párpados callados
Penetraron mi silencio
Escribí con noche en vela
Y con corazón latiendo,
Una paz en mis entrañas
Iba conmigo emergiendo
“No sé si te he visto antes
-le dijo a la hiedra el eco-
Pero tu palabra atenta
Sé que me viene de lejos”
Es la palabra de un poeta
Que vive cerca del tiempo
Que trae su dicha en su ojos
Y la frescura en sus versos
Y en su montaña de rimas
De horizontes, de recuerdos,
Quiso la estrella lejana
Servirle al niño de espejo.
“Has de caminar tú sólo
Sin prisas sin dios ni dueño
Has de ser aquí y ahora
Un hombre de carne y hueso”
“Has de hacerte carne viva
Has de morir de viejo
Mirar y tocar la aurora
Como hacías de pequeño”
“Cuando te quedes sin sangre
Sin sudor y sin misterio
Verás que las flores cambian
Que el verano está viniendo
Y en noches de primavera
Has de besar el fuego
Para curarte tus alas
Y volar así ligero”
“No vayas a errar tu vida
Tienes que orientar tu vida tu vuelo,
Cuando sepas lo que quieres
Pintarás tus bellos lienzos”
“Perdona a tu soplo sin alma
Pide perdón pecho abierto
Y practica tu religión
Del autoconocimiento”
“Quítate el miedo a la vida
Y la armadura de hierro
Y el mundo hallarás curado
De tanto estar siempre enfermo”
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Hoy he contemplado la matriz de lo que hay,
hoy al fin he entendido su esencia salvaje;
ha caído definitivamente el velo
de mis ojos. Camino solo en la negrura.
Hoy he visto que reina absoluto el azar
e impone un dominio caótico y confuso,
donde placer y dolor carecen de leyes;
en la negación de esto estriba la esperanza.
Algo, no yo, lanzó el dado de mi existencia,
repartió los naipes con los que estoy jugando,
superar su poder mi libertad no logra
y debo acatarlo para fruir de la dicha.
Sé que volverá la convulsión y el delirio,
la masa impenitente levantará ídolos
de nuevo ante los que se postrará sumisa,
otra vez Cronos se saciará con la sangre
de sus hijos, con la vida de los mejores.
Hoy he comprendido entre risas el escarnio
y me mantengo a fiel a mi serenidad.
No me salvará nunca mi vana rareza;
camino en la negrura sin cerrar los ojos.
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EL LENGUAJE DE TUS OJOS
Es mío el lenguaje de tus ojos
Al igual que es tuyo mis onzas y despojos
Parpadeas una, dos… y hasta cien veces
Es el lamento de un amor que padeces
Tus pupilas se dilatan, ya son lunas
Al avistar mi perfil entre las punas
Al contemplar mi sombra bajo el monte
Al perderse una lágrima en horizonte
Me despido con un guiño en el poniente
Esperando el día de perderte nuevamente.
Ver tus ojos que se bañan en rocío
Tocar tu piel que me llama sin receso
Reír entre tus negros y azules colores
Aquellos que se juntan con los cafés míos
Para acontecer el último de los besos
Que se dan los reyes y cantores
Los únicos amores.
(INKARREY)
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Nostalgia
Vino tu aliento en la noche
para posarse en mis labios
quizás en brazos del aire,
dime niña si lo sabes
dónde está el rumor que duerme
su sueño bajo los árboles,
porque estoy sola de noche
vienen todos tus recuerdos
en mi sueño a visitarme.
,
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Reblogueó esto en lascosasqueescribo.
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DESPUÉS DE LA MUERTE
Su muerte produjo muchas expectativas en la investigación sobre tan intempestivo acontecimiento. De ella sólo sabían que estudiaba Biología y que ese año había llegado desde Salta, su provincia natal.
La encontraron ahorcada con una media, en la bañera, completamente desnuda y una expresión de pavor latente en sus ojazos azules. Los investigadores dedujeron enseguida que se trataba de un homicidio. La la prenda retorcida en su garganta estaba suspendida del grifo del agua caliente, abierto de tal manera que el ruido del agua había tapado cualquier grito o sonido extraño proveniente del departamento. Y mientras los dolientes conformaban el séquito que esa lluviosa mañana acompañaba al féretro rumbo al cementerio, Blas Galíndez, el inspector de Policía comenzó la búsqueda del depravado que, no conforme con violarla, había coronado su maldad con un asesinato bestial.
Sigilosamente, el hombre llegó al panteón donde la habían depositado llevando dos barretas de acero con fina punta. Abrió las puertas ingresando al recinto. Buscó el cajón donde descansaba su víctima y empleando las barretas forzó las cerraduras, abriéndolo. Alicia aparecía traslúcida bajo la linterna de mano que la iluminaba. Esteban besó la pulpa aún fresca de aquella boca que lo desvelara desde que la conoció en un oficio religioso en la iglesia donde era párroco.
Durante semanas, enloquecido por fiebres desconocidas, se autoflageló con su cilicio, sintiendo los pinchos clavándose en su carne como mordiscos seductores. Después proyectó empeñar en el Montepío los candelabros de la sacristía para huir lejos del diablo que se le metiera en el cuerpo atormentándolo con cizaña incontrolable,descubriendo sus testículos transformados en bulbosos elementos dispensadores de lacerantes dolores.
La observó yaciendo entre sus brazos, a dentelladas destrozó su vestimenta desnudando el cuerpo como dos noches atrás.
Por los empañados cristales percibía las hojas arrastradas por el gélido viento nocturno, seguro de que nadie lo descubriría, la poseyó hasta extenuarse dentro del féretro.
Mascullando:“¡Qué sabrán las hormigas lo que yo hago en invierno!”,frase repetida por el macabro personaje cada vez que temía que alguien interfiriese en sus oscuros asuntos, se dispuso a salir tras cerrar el cofre con los cerrojos metálicos.
Al colocarlo en el estante su cabeza golpeó el pequeño altar. El arcángel se ladeó con tal ímpetu que la espada de su diestra se clavó en el ojo derecho de Esteban hasta la empuñadura.
El inspector de policía que andaba como sabueso detrás de sus pasos, lo encontró sin vida, la mañana siguiente. Extrañado por el cuadro que sus ojos estaban contemplando, repasó la mortal herida con sus dedos. Entonces ya no tuvo dudas respecto a qué elemento era el que corría como hilos paralelos a través del rostro deformado por el terror que el inconducente acto había originado:pequeñas hormigas rojas se filtraban desde aquel orificio, marcando derroteros gelatinosos.
AUTORA: Carlota de las Mercedes Gauna
SEUDÓNIMO: Carlota Dalton
octubre/2013
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Estupendo relato. Me gusto tu manera de narrar, felicidades Carlota.
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¡Mil gracias, Rafael! Un gusto que me hayas leido!
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Posdata.
Sábado por la tarde. Mi esperanza y yo en esta carta.
Veinte y tantas noches en medio del deber Inglés.
Las manos juntas en dos voces.
Mi espera tan paciente. Su espera con Fe.
En secreto. Nos escapamos como fuga hasta las seis. Hasta las cuatro.
No hay distancia que muerda. Más bien nos burlamos de ella.
Ante un reloj, algún día su tren a mi estación.
No soy yo. Es mi amor parecido irreal, sumiso, tan charlatán de él.
Vacía es la ilusión dijo la canción. Y aun persiguiendo realidad, es mi favorita.
Promesas vigentes. Y un “Querer” sin tiempo.
En el abecedario, como sopa de letras. Su nombre un poco largo.
En la forma de que muchos creen en cuentos de hadas, creo en este viaje.
Sin cobro, ni pasaporte. El próximo vuelo en este papel. Allá voy.
Un día más. Un día menos. Me albergo en el día más.
Sé que arriba está el norte. Y que hay lugar para el sur. Te invito Norte.
El camino más corto en un mapamundi. Y en un viaje mi carta se copa.
Una hoja menos de este block de cuarenta y ocho.
Un papel trota mundo. Mi carta.
Señor cartero. Mi carta como arte, júreme entregarle.
En la pausa de llegar a su buzón, ganas de saber.
Estrecha la distancia. Pequeño el tiempo.
Tiempo regala tiempo para jugar a este nuevo color.
Una carta, sin rimas vacías. Solo un corazón apuntando a mis manos. Primero en borrador, más luego para ser entendida.
Con fecha y postal. Una carta.
En el último renglón. Mi posdata: Esperadme.
Diana D: Rojas
Barreal-San Juan- Argentina
dianadaniela17@hotmail.com
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¡¡¡Bello, Dianita, bello!!! Cuánta esperanza, cuánto amor contenido, cuántas esperas…El amor se detiene en busca del tiempo…La carta es sólo un instrumento valedero…¡Te felicito!
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El eco de una sombra, no eres nada en realidad
pero sin dudar estorbas, cada día un poco más
Me desencantas y hieres, provocas mi hiel
me matas cuando quieres y me das vida otra vez.
Tus susurros son los gritos, que radias y al oír
quedo sordo y no me explico, porqué vienes a por mí
Corres quieto me alcanzas y golpeas sin tocar
panacea que mata, burla seria, eres contrariedad.
Negativo, tu lugar no está conmigo
el inquilino que lo ocupa se ha instalado eres testigo.
Pero te empeñas, en asaltar mi propiedad
del fuego eres la leña, de la nieve la humedad.
Y te engañas, si crees que estás en mí
eres la saña de un imbécil que ya no vive aquí
Corre, vuela y no pares en ningún lugar
tanto y cuanto tengo, no vas a cambiar
La compañía es mía, tu tienes la soledad.
El amor es mi batalla
Desamor, la guerra es tu paz.
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Kabalcanty
(En la estación)
El desamparo del andén
era tu mano enguantada en la maleta,
una mirada demorada en el confín de los raíles,
el futuro nebuloso, la novedad, el adiós,
la megafonía metálica invadiendo
el frío sudor en las sienes.
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mi nombre es Isabel Quintero Urquieta, escribo poesia y prosa, estoy a punto de publicar un libro de poemas, me gustaria publicar algunos aca
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Bienvenida, Isabel. Estás invitada a participar en el panel cuando quieras.
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amo la poesia, y encuentro que este es un buen lugar para expresarla, ahora me gustaria saber donde la podre escribir
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En este panel, Isabel, haciendo lo mismo que cuando dejaste tu comentario. Recuerda firmar tu poema, yo aprobaré tu intervención en cuanto la vea.
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quisiera un espacio para publicarlas, ud. me diran donde?
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TRANSFORMACON
Me he convertido en el antagonista de mis deseos.
He servido a la esperanza con ancestros de luz.
Concava la vida, se envuelve en mecanismos de precision.
Embelesados los astros,
con tu mirada estan.
Te enajenas con tu dolor.
Convexa la mirada, trocada esta al azar.
Incipiente tu sonrisa ante el rimero de mi cordura.
Se balancea la vida y la muerte,
en el osculo oculto de mi soledad.
ISABEL QUINTERO URQUIETA
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EL DESCENSO POR LA CALLE FUENCARRAL
El viejo revoco de las fachadas
tiñe de aire nostálgico el presente.
Angostas callejas de efluvio húmedo
que encauzan el vaivén del tumulto
y lo jalean con latido suave.
Desvencijadas tiendas de colores vivos
cuelgan escaparates anárquicos
encelados en gustos estrambóticos
o dantesca bisutería plateada
que refulgirán entre neones verdes.
No importa que vayamos desnudos,
ni que la cicatriz de la existencia
haga pliegue informe en el costado,
ni tan siquiera que nuestros glúteos
se abandonen al abismo de la gravedad.
Tu mano y la mía, sudorosas,
nos atan por la turba de ese asfalto
que tamborilea musicales las pisadas
y evade la apatía con talco aromático.
No hay dios, ni rezos dogmáticos,
que hagan titubear lo espontáneo
que se vierte cascada en la Gran Vía.
No sorprende que el sol no abrase
porque enfriamos su brasa con la lengua
del beso que nos dimos en la esquina.
Es el discurrir de la urbe,
el mar de los que obviaron el río
y ahora se dejan escurrir, embelesados,
por la carcasa seca de las aceras.
El cielo, sobrio, aguarda la noche
y serán los autos, con su eructo motorizado,
los que duden el tronío de la sombra.
Mas entonces, los galantes luminosos
ungirán de artificio nuestras pupilas,
alborotarán los dedos y los sexos,
santificarán bares y tascas
y, a lo último, en sabroso fragor,
seremos deseada ansiedad noctámbula.
Kabalcanty.copyright©
POEMAS SUELTOS
(Kabalcanty. 2011)
“ El poeta no vive para escribir, escribe para vivir.”
(Marina Tsvietáieva)
“…..sencillamente porque uno no escribe lo que quiere,
sino lo que puede.”
(Juan Gelman)
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– ILUSIONISMOS –
Cualquier día es bueno para rondar
la tibieza de las esquinas por doblar,
desentumecer la caspa que acobarda
ante la soflama amenazante del éxito
y atravesar el asfalto de una zancada
desvirtuando el rayo de sol filtrado.
Regar con silencios la escandalera
y tomar la palabra que no dijimos
para equivocarnos apaciguados al risco
de un escalón flotante bajo las rodillas
avistando la barriga cóncava de la nube
donde tanto titiló nuestro hueco.
Cualquier día es bueno para trabajar
lo volátil que esparcimos avergonzados,
mostrar el sonrojo adolescente enquistado
bajo tantas medias suelas superpuestas
y tostadas a la niebla de rayos catódicos.
Indigestarnos con un beso al vuelo
que escapó virginal en la amarillenta foto,
o con el suspiro de un secreto que temió
que una longeva pesadilla despertara.
Desvestirnos con el pijama que desbarató
el lúcido escaparate aupado sobre las cejas,
aquel que elaboramos con tanto ilusionismo.
Kabalcanty.copyright©
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NUEVA VIDA
AUTOR: RAFAEL RODRIGUEZ.
DR.
Cuando aquello pasó, al principio solo sintió un pinchazón en la garganta, en la yugular para ser exactos, después un ardor, como si se quemara por dentro. Primero el punchazo, después el ardor y por último la oscuridad, la nada. Pero ahora, al regresar al mundo y ser conciente de su persona, se sintió diferente: sus sentidos se habían agudizado, su mente se sentía mas ágil y lúcida, los olores y sonidos mas intensos; le costaba trabajo acostumbrarse a su nuevo estado. ¿Nuevo? ¿Qué es lo que había cambiado en ella? Sentía que todo. Su vida anterior había sido de fracasos y frustraciones. Su relación con su novio había terminado mal: él la había engañado con su mejor amiga, después la corrieron del trabajo porque a su jefe le había llenado el ojo una nueva colaboradora mas joven y bella. Se sintió tan mal que por eso esa noche decidió salir a caminar al parque que se encontraba enfrente de su departamento. Y ahí lo vio. Primero se sobresaltó, pues pensó que era un ratrero, pero después, cuando lo vio a los ojos, esos ojos hipnóticos, bellos, pero a la vez frios y enigmáticos, ya no sintió nada, solo el pinchazon y el ardor. Sinembargo ahorta todo sería diferente, el cambio que sentía en ella le daba esa certeza, y mas cuando lo vio descender del cielo oscuro, tapando la luna llena que iluminaba debilmente la noche. la había mordido un vampiro y ahora era uno con él.
–¿Qué soy, qué me hiciste?- le preguntó aun con temor.
–Nada, te di nueva vida, pero tu esencia sigue estando intacta. Aunque tal vez eres un extraño ser solitario que busca en la oscuridad de la noche su sombra, sin saber que la luz de un amor versdadero te dará el alivio de la nostalgia que te acongoja, o quizás eres un ser noctivago como yo que gusta de alimentarse de las almas perdidas y por mas que quieras cambiar no puedes, pues estan condenada a deambular como un muerto por la oscura vida de tu destino.
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A la administradora Auroraluna. Ya no veo mi relato EL AROMA, publicado la semana pasada. ¿Tuviste algun problema con él?
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Hola, Rafael. Gracias por tu participación, yo tampoco lo veo. ¿Seguro que lo pusiste en este panel? Si no excede las 50 líneas, vuélvelo a subir sin problemas.
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Si, ya lo habías revisado y dejado. Bueno lo voy a volver a subir. Gracias.
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-ESTA NOCHE-
Ésta noche, la luna me abriga
y este cielo me arropa
y tú, adormecida voluntad
eres fibra que palpitas
que me atrapas a tu antojo
y adulteras mis sentidos.
Ésta noche, tu boca es eterna
y éstos versos son sordos
y tú, mi retrato etéreo
eres bucólica alucinación
como una chispa atizada
entre ascuas efímeras.
Ésta noche, éste océano me serena
y éstas olas me mecen
y tú, fascinadora perturbación
eres el candil que me guía
entre mares turbulentos
y me regalas la ansiada calma.
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ATARDECERES
Cuando allá en el horizonte el sol se esconde y los alados seres el aire encienden.
cuando la paz del mundo se reincorpora a las almas que sueñan a toda hora,
cuando el ansia procura días de gloria y la infinita gracia su boca implora,
en el cofre del alma suelen verterse las sagradas palabras que a Dios, el hombre
en sublime momento ora en silencio, mientras llega la noche y todo es comienzo.
En ese instante parecería que la luz y las sombras son pan y vino
de una sola estructura que los convoca a ser parte de un mundo agradecido
que despierto se siente fortalecido y en espíritu y sangre es bendecido.
Así, como los ángeles cantan al orbe ensalzando al Eterno su plenitud
cuando el manto celeste se vuelve púrpura y se enciende la tarde en llama azul.
Así soñamos juntos los inmortales pues en Dios es posible la infinitud
que cual cordero sacrificado, Jesús, su Hijo, logró en la Cruz,
transformando la muerte envilecida en paso firme hacia la gloria
construyendo caminos que en su victoria nos conducen seguros hacia la luz.
Cuando absorta contemplo atardeceres que arrebolan torrentes en pos del sol
siento que crece en mí la imagen de un mundo nuevo donde el dolor
será un recuerdo que ni siquiera podrá velarnos su resplandor.
Si aquí en la Tierra has derramado tanto milagro, tanto esplendor,
¿Qué nos depara cuando nos llames hacia tu cielo, dulce Señor?
Y mientras busco mi estrella amada, entre gaviotas, allende el mar,
siento mis brazos que a Ti elevados, pierden su angustia, pueden triunfar…
Como esas aves, mi alma canta y hacia tus brazos quiere volar.
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Te ciñes en el tiempo y te escudriñas en la noche despiertas la ilusión de morir en los rojizos pétalos de tu eterno jardín , embriagando el aroma del fulgor de tus años … mis pupilas recorren tu delgada figura , oprimiendo en mi mente el ruidoso sentimiento de incansable y desesperado amor,que se enreda en el anhelado encuentro del que fuimos prisioneros en una cálida noche los dos.
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Beso tu espacio infinito
en el que tu cuerpo me sabe a mar
moja mis sentidos
arrasa mis emociones
cubres cada parte de mi ser
recorriendo gota a gota
el océano inalcanzable
de amor y sed.
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-100 días-
Hoy, cien lunas,
me separan de ti.
Hoy, me embriaga
tu olor, tu recuerdo.
Hoy, cien sabores
son mieles por gozar.
Hoy, la perdición
tu sonrisa, tu boca.
Hoy, cien alboradas
prenden mi memoria.
Hoy, me asedian
cien maldiciones .
Hoy, cien lamentos
desgarradores.
Hoy, lo que no fue
ya nunca será.
Hoy, extenuado
aquelarre, mudo.
Hoy, siento cien notas
de viejo piano.
Hoy, cien palabras
son mi consuelo.
Hoy, sobre la fría
arena te escribo.
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Me desvelo y fumo
para disipar ausencias.
Una soledad polar
me arropa indeseada,
y seductora, al cabo,
siendo la noche
un silente vahído
que me reclina víctima
de mi propio crimen.
Pensar y pensar
siempre en el borde,
en el desmayo urdido
en la apatía del sueño,
el telón sobre la ventana,
el globo de la farola
como cutis de la Luna.
Me desvelo y fumo
vernáculo de ceniza charol
que comienza a teñirme
la planta de mis pies.
Kabalcanty.copyright©
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Nostalgia
Amo las calles vacías y en silencio
allí donde reside
el alma de la noche,
allí donde se mueven los recuerdos
y queda, sal y azúcar
aquello que se extraña.
Recorre sobre un arco de lo incierto
la luna en los jardines,
telarañas de sueños perseguidos
se mecen temblorosas en los pechos.
Florecidas heridas
como rosas se abren…
La noche en los rincones, padrenuestro
del corazón, sublime
oración de esperanza.
Camina una ilusión sobre un desierto
reseco y habitado
deseando ser ansia…..
Transitan las pisadas de lo nuestro
para que no se olvide
que siempre fuimos polvo,
el eco de los pasos olvidados
donde la oscuridad se torna cielo
para nuestra nostalgia…
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PARAGUAS
Ella dijo: “Acércate sin miedo
todo lo que me cubre te sostiene”
Y esa carpa gigante de su pecho,
ese paraguas tierno y espontáneo
hace de mi otra cosa.
Aunque llueva dolor, aunque la noche
deje jirones negros en mi espalda,
y los chuzos se mezclen con mis miedos,
yo me siento a cubierto y arropado.
Que es la inseguridad sino borrascas
que nos calan de dudas, que nos llegan
sin paraguas ni pecho que nos salve.
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SOMBRAS CHINAS
Viven en la lisura donde tengo
puestas las ganas de tu risa.
Ocres de antigüedad de donde vengo
cambiando hacia el arena de tus manos,
a salvo del agobio de la prisa,
unas veces gigantes, otras veces enanos.
Nostálgicos de todos los pianos
desde la claridad de su negrura
y del sonido negro.
Donde la nitidez está segura.
“Andante, presto, allegro”
Cuando la vida de la tarde es más oscura
vienen desde el recuerdo del futuro,
surgen desde el proyecto
de un nacimiento más maduro.
El sonido tocable del afecto
en sus notas seguro,
es alegre y perfecto.
Es la sombra un efecto
que descarga en tu boca mariposas
caídas de la nada.
Del silencio de sombras crecen rosas
puntiagudas, perfectas,
ponedoras de luz en tu mirada.
Se miran las paredes envidiosas
de sus curvas tan rectas.
Es una multitud de tres, y suenan
en el silencio mil trompetas claras.
En la ventana se desencadenan
las claridades nuevas de sus caras.
Ahora la luz se pinta en las esquinas
del porvenir del beso.
¡Ay dios si ahora me besaras¡
esta felicidad de sombras chinas
que en mi boca adivinas,
no seria un contraluz travieso.
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LA LLAVE
Como suenan tus pasos cuando llegas,
escucho las pisadas que despliegas.
por el pasillo a oscuras y el rellano.
La alfombra de la entrada despereza
la lluvia de tristeza
que dejó tu salida en la mañana.
Y se asoma la lamparita azul de la ventana,
esperando incendiarse de tu mano.
En la monótona travesía de mi día,
silencioso y opaco mi trasiego
del tiempo de la luz hacia la umbría,
y de vuelta a la luz, siempre tan ciego.
Se escuchan tus pisadas un instante.
Vuelvo a hojear los libros del estante,
musito una canción mientras se cierran
taciturnas las puertas tras tu paso.
Se mueve un vientecillo
que agita la cortina y el visillo,
y la colcha que cubre nuestra cama
abandonada por un tiempo, te reclama
hacia la habitación donde me entierran
en la hora más alegre del ocaso.
La cerradura dilata su ranura,
estirada hacia ti, ansiosa y viva,
se despereza con esa ternura
que tus cosas vierten de forma intuitiva,
en espera del tacto de tu mano,
o del hielo caliente de la llave.
Por un momento callo, ya cercano
el vaivén de tu pecho tan suave
y que antes perecía tan lejano.
Permanezco más quieto, pensativo.
Meditabundo, inerte, pero vivo
donde la vida la esperanza agrieta.
¡Ay que sería el día sin la inquieta
esperanza de oír tus pasos a mi puerta!
¡Sin tus blancas pisadas está muerta!
Nada sin el sonido de cerrojos
que saltan cuando te abres a mis ojos.
Ya no suenan los ecos de tus ecos,
ya no espero en silencio, ya no callo,
donde hallaba penumbra ya no hallo
la sombra del vacío, ya no hay huecos.
Acabó la canción de ausencia que silbaba.
Mientras tanto aspiro tu regreso,
olorosa llegada que esperaba
como el paseo de un preso,
por las estancias vacías que atraviesas,
y en tus viejos zapatos
se escriben e imaginan tus relatos
ya mudos de promesas.
En tus zapatos, junto a la ventana
descansará mi fe para mañana.
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EL TRAPECISTA TRISTE
No parece trivial y lo parece
palparse los bolsillos
en busca de una idea para asirse.
Cuando suena el silencio
y aúllan los latidos a lo lejos.
Cuando llega la muerte de la pólvora
que dejan los disparos de unos besos,
la vida es un cartucho de fogueo.
Otras veces, si doblas esa esquina
que se enrosca en la sombra,
aparecen los ojos de la luna
con las cuencas vacías de promesas.
Ya no te queda nada por mirarte,
no se sostiene el peso de tu cuerpo,
no dejarás de ser, no ser, posarte
allí donde se sientan los más tristes
a la espera de un ultimo saludo.
Gesto final, en un intento vano
de asumir elegantes la derrota.
Y sin embargo llegan otras veces
cuando no encuentras asas a la vida
que ves, en el rincón más viejo
de la memoria gris, difuminado
aquello de lo que tú naciste:
Sonido, fuerza, luz, la herida abierta
y un último trapecio que gravita.
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La playa y tu
Hace fresco… la tarde
nos alivia del peso
de la espera
Sobre el agua primera
el crepúsculo arde
como el fondo del beso.
Y es al fondo
hacia la interminable playa grande
mar y arena
donde yo te respondo
deja la soledad
que el alma ande,
y crezcan farolillos de la pena.
Hace fresco… y el frío
envuelve la sorpresa
como una marejada.
Cielo mío
es el cielo quien besa
y el beso llamarada.
Inagotable,
siento el escalofrío
que vuela hacia la nada
de un río ingobernable,
una boca caliente y congelada
me brinda una caricia que es promesa
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PAPEL MOJADO
¿Que quedará mañana
cuando seas recuerdo?
¿Hacia que horizonte
dirigirán las súplicas mis ojos?
¿Que folios amarillos leeré,
que lienzo secará
la tinta de mis manos?
Dormirán las postales,
fenecerán los besos como rosas
de pétalos oscuros,
y morirán las hojas del otoño
sin apenas tocar
el suelo que pisamos.
Pedirán mis bolsillos
el tacto de la ausencia de tu mano
se quedaran tan mudas las palabras
y no tendrá sentido
el alfabeto triste que aprendí
cuando solo era un niño
Me dejaré colgado
en un rincón sin luz, en un lamento
del fondo de mi armario
el lápiz, la voz, y la promesa
que estalla en las entrañas
del verso cotidiano.
No volverá la risa
a moverme los dedos ni los labios.
Ni escucharé al papel
susurrarme tus letras en la noche.
Solo serás recuerdo
y a mi me quedaran
demasiadas mañanas.
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AUSENTE
No siempre, y sin embargo,
se llenan
de ausencia los silencios.
Ni te embarga el silencio,
ni se ausenta
lo que siempre te llena.
Hay un siempre ,tan lleno
de silencio embargado,
donde buscarte, ausente…
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La rosa
La palabra es la idea.
La belleza se posa
en el pétalo rojo que presume.
Es mucho más hermosa
cuando se saborea
la idea en el perfume
de la rosa.
Vive y vibra olorosa
la flor de la palabra que resume
lo que ahora te doy,
pues no tengo otra cosa.
Palabra que consume,
la rosa, ayer y hoy,
de mi alma tormentosa.
Te entrego lo que soy
en la voz de una rosa.
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No he recuperado la memoria de aquel tiempo
en el que era una niña
que no soñaba con ser mujer,
perdida entre naranjos,
acariciando
el tronco de un árbol
mientras me hacia
fuerte de mente
y débil de espacio,
será por eso que no hay tanta diferencia
entre lo que me hace
latir y lo que me hace daño.
Toda esta confusión de no saber muy bien como distinguir
entre un acierto y un error tiene su origen
en los campos impregnados de amapolas
que idealicé en mi memoria.
Solía pensar que los caminos eran infinitos,
me equivoqué,
hay un único camino lleno de desvíos
y no importa cuál escoja,
en todos me perderé
y volveré a encontrarme
una y otra vez.
Astro Labio
Bienvenido todo el que quiera, aquí os dejo mi cuaderno de bitácora:
http://astrolabiio.blogspot.com.es/
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Hola !, Soy AIDA , la ABUELA_TARJETA , de Argentina M e agradaría poder compartir mis creaciones es esta pág., si me está permitido. No sabría como hacerlo—–QUE TENGAN TODOS *UN FELIZ COMIENZO Y DESARROLLO DEL 2014*-
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Bienvenida, Aida. Para compartir tus creaciones solo tienes que añadirlas como comentario, tal y como has hecho con tu saludo.
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Chorros de palabras, van cayendo como lluvia fresca en verano de los creadores. Sentimientos, emociones, y la sensibilidad a flor de piel, toma cuerpo, dando forma, y vida al arte de escribir, ni es casualidad, ni mucho esfuerzo, solamente brota de sempiternos sueños de espíritus inquietos, de poetas y bohemios y buscadores. No le importa méritos, reconocimientos o congratulaciones, no espera premios, Cervantesco, o Nobel, sino simplemente lo hace para romper el dique de melódicas creaciones de su espíritu inquieto. RICHARD NUÑEZ
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Feliz año a todos.
DILE
Ve y dile, te lo ruego,
que los ángeles no tienen alas negras,
que la vida se pasa en un suspiro apenas
y que el tiempo me pesa como una culpa ajena.
Dile que a veces, por las noches,
los colores me cubren;
y de mañana lloro con lágrimas serenas.
Más quiero que le digas
que se estira la noche en un subir constante
y di que la bajada, un tobogán caliente,
es girar, derrumbarse.
Ve y dile, por favor,
que se rompen los sueños si agitamos los miedos,
si nos suenan palabras que dejamos perdidas
atronan los oídos, descoyuntan los cuerpos
Dile que ya me he muerto en un vivir doliente,
que viviré muriendo si es vivir lo que siento
sentiré lo que vivo sin decir lo que quiero.
Dile, tan solo di que aquí estaré despierto…
Ve y vuelve;
no hay prisa, tengo tiempo.
cuéntale que en la tarde no habrá sueños
ni acostaré a la luna, ni le pondré sombrero.
Mírala y luego dile
que la esperanza es verde y camina sin tregua,
que me podrá la pena,
se enrocará mi torre hacia el denso recuerdo…
Ve y dile , te lo ruego.
A mi me gustaría, pero ahora no puedo
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HOJAS MUERTAS
Debe elevarse el grito
para el que me amordazo, crezco, anego?
La luz velada que se trasmuta en rito
desvalida, titila, como el farol de un ciego.
Desembrida las ansias de beber la tibieza
en inseguridades; báñate en dudas rojas.
Esa seguridad tan blanca, esa firmeza,
sabe a jactancia amarga que muere con las hojas.
Los cerrados salones de las almas, las ganas
ya en otoño, y de otoño, y de hojas se han llenado.
Vino el otoño gris tan poblado de canas
que cuelgan la coherencia de un hilo equivocado.
Y cuelgan las preguntas igual que telarañas
que buscan asumirse. Ser y estar, encontrarse.
Se levanta una brisa y mueven las pestañas
el temblor de la fe con que tambalearse.
Quien tiene las respuestas?
A veces las preguntas
solo traen hojas muertas.
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Lucharemos dos guerras y una batalla,
no habrá vencidos, solo dos perdedores.
Seguramente acabaremos perdiendo el norte y los papeles,
para arrancarnos la pena y la ropa.
Cuando todo acabe,
alzaremos una bandera blanca,
hecha con desgarros de sábanas.
Y así yaceremos tan inertes como vivos,
ausentes y tangibles.
Yo seré esa que después de vencer y ser vencida
contará los días como hoy más uno,
tu, como ayer más dos.
Viviremos entre los mismos cuatro puntos cardinales
pero yo hoy,
tu ayer.
Suerte será no encontrarnos,
mala suerte que sea verdad.
Si me dejas viviré en una isla durante 30 años,
esperando que la guerra acabe.
Como Hiroo Onoda.
No creeré a los que digan que la guerra ha acabado.
No mientras oiga los disparos de mi corazón
y mis lagrimas sigan atrincherando sentimientos.
Seguiré luchando contra los fantasmas con los que me comparaste.
Y un día tejeré con sus sábanas el vestido que has de llevar.
Terminará por segunda vez la guerra.
Quedará una fecha para la historia,
dos bajo tu nombre.
Recordar será fácil para el que tenga memoria.
No será fácil para mi
que te sigo viviendo.
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PIEL DE MELOCOTÓN
Piel de melocotón que daña si la extraño,
todo lo que supone tener tu piel tan cerca…
Tobogán, balancín, plenitud de las horas
esperando en el lecho con las manos abiertas
Piel de melocotón, tacto germinativo
que nutre de calor las aguas de la alberca,
claridad boreal que se enciende en los dedos
porosidad de luz, epidermis perfecta.
Piel de melocotón, al paso de tu paso
vive la calidez y muere la azucena.
Abre y cierra el deseo la cortina del hombre
con los labios vacíos y la boca tan llena.
Piel de melocotón, denso tapiz que cubre
al alma que respiro, todo lo que se entrega.
El roce de esa línea fugaz; desliz, suspiro
meridiano en mi mundo. Liberación, cadena.
Piel de melocotón que hace sentirse pleno.
Espacio en que recuesto la nube de la pena
Dominio que manejo, cristal de mi reflejo
donde me siento cal, y soy tan solo arena.
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