Freddy Santos es el siguiente autor invitado por la comunidad literaria de Valencia Espaciocrea, que cíclicamente entrevista a escritores seleccionados por el programa de liberación de talentos de los talleres de escritura creativa dirigidos por Aurora Luna y adscritos a Libro Vuela Libre en la Comunidad Valenciana. Con esta entrevista vamos a celebrar la publicación de «Un poema en Múnich», su última novela, inspirada en la Alemania del periodo de entreguerras, que también formará parte de las recomendaciones en curso del club de lectura de Luna de Papel.
Entrevista a Freddy Santos, autor de «Un poema en Múnich»:
L.V.L.: Hola, Freddy. Enhorabuena por la publicación de la novela «Un poema en Múnich». A las comunidades de escritura adscritas a Libro Vuela Libre les gustaría conocerte mejor. ¿Podrías hablarnos tu experiencia como lector y escritor hasta ahora?
Freddy Santos: Realmente mi profesión es el deporte . Soy entrenador de tenis internacional y dirijo proyectos deportivos . Me encanta leer desde pequeño y soy un compulsivo lector de cualquier tipo de novela . Escribía relatos cortos y poemitas hasta que mi hermana me animó a continuar algo mas allá mi relato. Tengo algunos ensayos de mi profesión y artículos, también un libro de poesías raras y relatos cortos.
L.V.L.: ¿Qué te aportan la escritura y la lectura?
Freddy Santos: La lectura me aporta todo lo que soy . Leer me permite aprender y vivir un montón de vidas . La escritura es una necesidad para entenderme y entender el mundo. Me encanta contar historias.
L.V.L.: ¿Y qué te motivó a escribir «Un poema en Múnich», Freddy? Háblanos de tu novela.
Freddy Santos: Este libro me ha demostrado que soy capaz de narrar una historia. Que con constancia y algo de disciplina puedo tejer una historia, darle sentido y llevarla hasta el final. Los personajes cobran vida propia . Mi novela habla de la imposibilidad , del deber, de los seres arrastrados por los acontecimientos, del caos de vivir y de intentar hacerlo con dignidad. Es una historia que se mueve en el tiempo y nos lleva por la Alemania entre la primera guerra mundial y la segunda gran guerra. Es una historia contada a través de cuatro personajes y con capítulos muy cortos.
L.V.L.: ¿Qué proyectos literarios tienes en este momento?
Freddy Santos: Estoy intentando terminar otra novela situada en la Europa de la posguerra.
L.V.L.: Para terminar, Freddy, coméntanos cualquier otro tema que sea importante para ti o que nos pueda ayudar a conocer mejor esta novela que has escrito.
Freddy Santos: Un Poema en Múnich nace de una idea sencilla: un desconocido o desconocida que escribe un poema en un sitio público, y que va destinado a alguien que no conocemos. La convulsa Alemania de los años 20 y 30 del siglo XX es el marco elegido para un relato lleno de recovecos, de pasiones e historias entrelazadas, con un poema como punto de partida de toda la trama.
Propuestas de lectura de los clubes de escritura de Valencia Espaciocrea, Luna de Papel y Libro Vuela Libre. Fragmento de «Un poema en Múnich», de Freddy Santos:
Klara
Querido Jakob:
Me encontré con tu padre en Seefeld este otoño y le pregunté qué tal tu viaje. Me dio esta dirección de tus familiares y me atrevo a escribirte estas líneas.
Supongo que estás al tanto del fuego mundial que se está expandiendo desde la caída de la bolsa en Nueva York. Yo voy a las reuniones del partido comunista como oyente y hablan de que el capitalismo ha demostrado no ser la solución para nuestras sociedades. Nuestro país lo va a pasar muy mal. Están cerrando muchas fábricas y empresas en todos lados y me temo que esto no ha hecho nada más que empezar. Estoy muy preocupada por Hans. Estuvo todo el verano trabajando en la granja de su padre y volvió a Berlín cansado, pero muy ilusionado con encontrar trabajo. Ahora todo se ha complicado y le escribieron de su hogar que las cosas no iban bien por su casa. El padre pidió prestado dinero para la cosecha y ahora todos los intereses se estaban disparando y amenazaban con quitarles la propiedad. No sé nada de él desde hace semanas.
Se te echa de menos, la verdad. Éramos un buen equipo los tres juntos y, ahora que estoy sola, Berlín me parece cada día una ciudad más gris y peligrosa.
En las calles se repiten cada día los enfrentamientos entre las facciones comunistas y las camisas pardas del loco vocero ese de Goebbels.
No, no soy comunista, jaja. No todavía. Pero en la escuela de arte muchos de mis compañeros asisten a sus reuniones y me aburro sin vosotros.
La verdad es que sería bonito un mundo sin clases y donde pudiéramos repartir toda la riqueza entre todos. ¿No crees?
Cuídate mucho, austriaco, y no maltrates el violín.
Mil besos,
Klara
5 diciembre de 1929
Espaciocrea : : Escritura Creativa en Valencia 
PANEL DE ESCRITORES